En uno de nuestros anteriores posts, hablábamos de la medicina ayurvédica y su capacidad de conseguir el equilibrio físico, emocional y mental a través de remedios herbales o cambios de hábito. Precisamente, dentro de estos cambios de hábito queremos subrayar la importancia de la práctica de actividades complementarios al Ayurveda debido a los múltiples beneficios que nos aportan.
El yoga es una de las actividades que más ventajas proporciona a nuestra salud, pero no solo a nivel físico, sino también emocional y mental. De hecho, habituarnos a practicar yoga diariamente puede llegar a cambiarnos de por vida; dedicar diez minutos al día a realizar diversos ejercicios de yoga, ayuda a que mejoremos mucho en la ejecución de las posturas y a alcanzar antes un estado pleno de bienestar.
Al igual que el Ayurveda, uno de los puntos fuertes del yoga es que ayuda a conseguir un estado de conciencia mental en todo momento a través de la realización de ejercicios con nuestro propio cuerpo que ayudan a conectar con la parte más profunda de nosotros mismos. Debido a esta conciencia plena, el yoga nos permite conocernos mejor y tener presentes cuáles son todos nuestros puntos fuertes y débiles.
El yoga no es simplemente conseguir relajarse y desconectar de la rutina diaria. La ejecución plena del yoga la conseguiremos cuando seamos capaces de escucharnos a nosotros mismos y observar nuestros pensamientos y procesos mentales, lo que nos permitirá vivir la vida de forma totalmente plena.
A continuación, vamos a enumerar algunos de los numerosos beneficios que nos aporta la práctica del yoga:
Con la práctica del pranayama, podremos controlar mucho mejor la respiración además de generar un estado de paz y proporcionarnos mayor resistencia a la hora de realizar otros deportes o esfuerzos físicos.
Por otro lado, mantener una dieta sana y equilibrada, apoyada a través de sustancias como el oro potable procedente de la alquimia, haremos que el proceso de obtención de flexibilidad y evolución del ser humano sea más rápido.
Gracias a la práctica diaria de yoga, será más fácil corregir nuestras posturas hasta el punto de ejecutarlas a la perfección, con una buena alineación del cuerpo y en constante equilibrio.
Como hemos podido observar, gracias a esta actividad podremos ayudar a nuestro bienestar físico y alcanzar un estado de paz mental que nos permitirá ser conscientes de nosotros mismos y de nuestra parte más espiritual, consiguiendo así un perfecto equilibrio físico, emocional y mental.